El Trastorno del Espectro Autista (TEA), es un trastorno del neurodesarrollo que se caracteriza por un desarrollo atípico en las habilidades de comunicación e interacción social, y la presencia de un repertorio restringido de actividades e intereses.
¿Qué es el Trastorno del Espectro Autista?
El trastorno del espectro autista (TEA) es una condición caracterizada por déficits persistentes en la comunicación social recíproca, la interacción social y patrones de comportamiento restrictivos o repetitivos. Estas dificultades se manifiestan desde la primera infancia y afectan el funcionamiento diario de quienes lo padecen.
El término «espectro» se emplea debido a la amplia gama de manifestaciones que pueden presentarse en el trastorno, que varían según la gravedad, el nivel de desarrollo y la edad del niño o niña.
Anteriormente, en la clasificación del DSM IV-TR (Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales), el autismo se encontraba dentro de los Trastornos Generales del Desarrollo, que incluían también el Síndrome de Asperger, el Síndrome de Rett, el Síndrome Desintegrativo y el Trastorno General del Desarrollo no especificado.
Sin embargo, el concepto de autismo ha evolucionado significativamente a lo largo del tiempo. Actualmente, el DSM-5 TR (Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales) lo agrupa dentro de los trastornos del neurodesarrollo, y considera al autismo como un espectro. Por eso, ha cambiado el término y se lo conoce como Trastorno del Espectro Autista.
Este cambio de perspectiva ofrece numerosos beneficios, ya que el enfoque en una dimensión más que en una categoría permite una evaluación e intervención más personalizada de las necesidades individuales de cada niño y niña.
Grados de Autismo: los 3 tipos de autismo en niños
Dentro del Trastorno del Espectro Autista (TEA), se reconocen tres niveles de gravedad que se clasifican en función de las dificultades de comunicación social, patrones de comportamiento repetitivo y/o restringido, así como el nivel de apoyo necesario para las actividades cotidianas.
Grado 1 o Autismo Leve
Requiere apoyo leve. Las personas con este nivel pueden tener dificultades en la comunicación social y la interacción social, pero generalmente son independientes en la vida diaria.
Las personas con autismo leve, generalmente pueden hablar de forma fluida y con un vocabulario amplio, comprender el lenguaje corporal y las señales sociales básicas, interactuar con los demás, aunque con algunas dificultades y ser independientes en la mayoría de las actividades de la vida diaria.
Sin embargo, pueden necesitar apoyo para iniciar y mantener conversaciones, entender emociones complejas, adaptarse a cambios en la rutina o entornos nuevos, y desarrollar habilidades sociales más complejas.
Grado 2 o Autismo Moderado
Requiere apoyo moderado.Las personas en este nivel enfrentan dificultades más significativas en la comunicación social e interacción, pudiendo requerir ayuda en diversas áreas.
Las personas con TEA moderado, generalmente presentan un lenguaje verbal menos fluido o incluso no verbal, tienen dificultades para comprender el lenguaje corporal y las señales sociales, experimentan dificultades significativas en la interacción social, y requieren apoyo en la mayoría de las actividades de la vida diaria.
Sin embargo, con el apoyo adecuado, los niños con TEA moderado podrán desarrollar habilidades de comunicación verbal y no verbal, aprender a comprender las emociones y las intenciones de los demás, participar en actividades sociales con apoyo y alcanzar un cierto grado de independencia en la vida diaria.
Grado 3 o Autismo Severo
Requiere apoyo extenso. Las personas con este nivel tienen dificultades graves en la comunicación social y la interacción social, y necesitan un apoyo considerable en todos los aspectos de la vida diaria.
Los niños/as con TEA severo, generalmente presentan un lenguaje verbal muy limitado o ausente, tienen grandes dificultades para comprender el lenguaje corporal y las señales sociales, y requieren un apoyo extenso en todas las áreas de la vida diaria.
Sin embargo, con un apoyo individualizado y constante, los niños/as con TEA severo podrán desarrollar algunas habilidades de comunicación, como el uso de imágenes o gestos, aprender a regular su comportamiento y sus emociones y participar en actividades con un alto grado de apoyo.
Por último, teniendo en cuenta el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM V – TR), también hay que tener en cuenta en el diagnóstico de TEA, algunos detalles importantes que pueden ayudar a entender mejor la situación de tu hijo/a:
- Si presenta o no problemas de aprendizaje.
- Si tiene dificultades para hablar o comunicarse.
- Si existe algún factor de riesgo, es decir, condición médica, genética o ambiental que pueda estar relacionada.
- Si muestra signos de catatonía, que es una condición que afecta el movimiento y la capacidad de respuesta.
Estos detalles adicionales pueden ser útiles para entender mejor las necesidades de tu hijo/a y cómo ayudarle mejor.
La Importancia del diagnóstico de Autismo
Reconocer y comprender el autismo es fundamental para brindar el mejor apoyo posible a los niños y sus familias. Es esencial tener en cuenta que el autismo es una condición variable, y los grados de afectación pueden evolucionar con el tiempo. Sin embargo, con el apoyo adecuado y las intervenciones tempranas respaldadas por la evidencia científica, se pueden lograr mejoras significativas.
Por tanto, el diagnóstico precoz y la intervención temprana son piedras angulares en el manejo del Trastorno del Espectro Autista (TEA). Identificar el TEA en etapas tempranas permite iniciar intervenciones especializadas que pueden marcar una diferencia sustancial en el desarrollo de las habilidades sociales, comunicativas y cognitivas de los niños afectados.
Se ha comprobado que las intervenciones tempranas no solo ayudan al niño con TEA a desarrollar habilidades importantes para la vida diaria, sino que también benefician a toda la familia al proporcionarles herramientas y recursos para comprender y apoyar mejor a su ser querido. Además, al abordar las necesidades del niño en una etapa temprana, se pueden mitigar los desafíos futuros y promover un mayor nivel de independencia y calidad de vida a largo plazo.
Si tienes preguntas o inquietudes sobre el proceso de diagnóstico temprano del autismo, no dudes en comunicarte con nosotros. Estamos aquí para responder tus preguntas y proporcionarte la orientación necesaria. Además, te facilitamos dos pruebas diagnósticas elaboradas por nuestros expertos para ayudarte a identificar posibles síntomas iniciales y aclarar cualquier incertidumbre que puedas tener.